Este tipo de suelo es cada vez más solicitado tanto para hogares particulares como para establecimientos de acceso público u oficinas. Las tarimas laminadas reciben ese nombre debido a su composición de materiales.

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Está formado por varias láminas o capas:

 

Capa superior, hecha en celulosa y por diferentes resinas que protegen al producto aportándole gran durabilidad al suelo. Esta capa, muy resistente, con la pisada de manera continua y sufre por lo tanto un desgaste mayor.

 

La segunda capa es la que queda visible en el momento en el que se instala el suelo y está hecha por un papel decorativo. Esta, condiciona el tipo de diseño y el color de nuestra tarima laminada. En nuestro catálogo disponemos de una amplia variedad de colores y diseños para conseguir el efecto visual que mejor se adapte a vuestro gusto.

 

La tercera capa sirve para aportar al suelo una mejor estabilidad y consistencia. Esta capa es muy importante ya que su función es la de que el suelo laminado quede perfecto. Su efecto nivelador se encarga de suavizar las irregularidades y, generalmente, está compuesta de un tablero (HDF)

 

La elección del suelo de nuestro hogar es vital para conseguir crear ambientes cálidos que se adapten a nuestros gustos personales. Los suelos laminados logran una imitación muy realista de la madera natural. Además, gracias a su gran resistencia frente al desgaste y a los impactos, está siendo cada vez el  suelo de madera más usado.

 

Ventajas de poner suelo laminado y tarimas laminadas:

A nivel visual y estético es un suelo muy logrado que se aproxima mucho a la calidez de la madera.

 

Podemos disfrutar de un suelo con estilo, además de elegir entre una amplia variedad de colores, diseños y marcas.

 

El precio de los suelos laminados es mucho más económico que la madera natural, haciéndolo mucho más asequible para los diferentes bolsillos.

Su instalación es muy sencilla, gracias al eficaz sistema de sellado se evita el filtrado del agua.

 

Las tarimas laminadas son muy durables y responden a los criterios de resistencia más importantes establecidos por la normativa europea.